Esto no es normal...

Es de suponer, por todo lo que no dejan de decirnos diariamente en todos los medios de comunicación, que nuestro Gobierno (el entrante + el saliente) debería ajustar al máximo los gastos pues no están las alcancías como para derroches (de hecho no queremos ni saber cuánto les queda pues es posible que nos fallaran los esfínteres del pavor de revelarse dicha cifra fruto de su mala praxis).







Bien, por ello Paco Paila propone una medida de ahorro urgente. Resulta que fui al cine a ver la nueva animación llamada "El gato con Botas". Imagínense: una sala repletica de niños pequeños, sus padres, madres, tíos, ... todos esperando a que comience la película, y ¿quién cree que se anunciaba antes de la misma? otras películas para niños obviamente, que no atienden a la cuestión de hoy, tras dos spots del gobierno que al menos a un servidor le llenaron de bochorno:



El primero, el anuncio de la Lotería de Navidad. Una superproducción digna del mismísimo Tim Burton (al que creo le copian al menos la banda sonora) para... ¿para qué? ¿es que vamos a comprar aún MÁS lotería de Navidad? obviamente no. Loterías y Apuestas del Estado es una de las llamadas "joyas de la corona": algo que el Estado va a vender al mejor postor para sanear sus cuentas, pero creo que este hecho no hace más que justificar la necesidad de: una campaña más austera (no están las cosas para derrochar) y visto desde el punto de vista del futuro inversor/comprador si ve tamaña inversión publicitaria, ¿no pensará quizás que hay que invertir demasiado trozo de pastel para recoger luego migas? ¿que no le merece la pena el riesgo?(juzguen ustedes mismos, y perdón por lo erróneo del juicio de quien cree en lo justo sólo del dinero ganado con el esfuerzo del trabajo)



http://youtu.be/6J5CAJIkiX4





Lo que de verdad me sacó de mis casillas fue el segundo video, inicialmente destinado a retrasar el inicio de consumo de alcohol en los jóvenes: ¿A qué clase de imbécil se le ha ocurrido poner un vídeo en el que el guión reza: "a los cinco años lo normal es querer ser astronauta... y a los trece lo normal es beber alcohol" en una sala repleta de infantes?

Dejó estupefactos a todos, salvo a mi pequeña sobrina (en la edad del astronauta) que incrédula me preguntó por qué. "¿Por que qué, cielo?" le dije abochornado pues mis impuestos han servido para pagar este despropósito. No dejé que mi querida niña pensara más en ese disparate y atajé rápido: "Éso es mentira. No te preocupes"



http://youtu.be/fBvUVcSqpXE



Como sé que esta entrada no va a servir más que para calmar mis ánimos sólo puedo aconsejar a todos los que vayan a ver dicha película con sus niños, primos, sobrinos, etcétera, que al menos retrasen su entrada un par de minutos o, si se dan cuenta demasiado tarde y ven los ojos de sus niños posados en este anuncio, acorten rápido desmintiendo a este Gobierno que bien podría ahorrarnos algún disgusto algún día, puesto parece que de nuestro dinero sigue disponiendo para cualquier chorrada que se le antoje oportuna.